Para que se sienta a gusto en la
cocina, lea y vea estos consejos para optimizar el tiempo y cocinar mejor.
No queremos que se convierta en un cocinero profesional, pero cortar lechuga, picar ajo y sacarle la piel al pollo pueden ser tareas que lleven más tiempo del necesario lo que nos puede alejar de la cocina y terminar pidiendo una pizza en el delivery.
1. Cortar hierbas con tijera
Es mucho más rápido tijeretear las hierbas frescas que picarlas en la tabla con un cuchillo. Llene una taza o un frasco con las hierbas e introduzca la tijera para ir cortando hasta el fondo, o dejarlas caer directamente en la olla o sobre el plato terminado (a modo de decoración) a medida que las corta. Sostenga el ramito con firmeza y comience a cortar desde arriba, incluyendo los tallos tiernos de hierbas como cilantro, ciboulette, menta y perejil. La albahaca fresca queda mejor partida a mano. Tome como referencia que un manojo de 25 g de perejil rinde unas cuatro o cinco cucharadas de perejil picado. Las tijeras de cocina también son útiles para cortar cebollas de verdeo, los tallos duros de las verduras de hoja y para despuntar chauchas, uva y grosellas.2. Picar ajo
Para no tener que lavar el prensa ajos, pruebe machacar el ajo con la técnica que emplean los chefs. Apoye sobre la tabla de picar el diente de ajo, sin pelar, y aplástelo presionando con la parte plana de la hoja de un cuchillo. Retire la piel y pique finamente con una pizca de sal.3. De paso, una calabaza
Si va a encender el horno para preparar una carne al horno, al mismo tiempo puede poner a cocinar una calabaza entera. El horneado no solo mejora el sabor sino que ahorra tiempo porque evita el trabajo de pelar la calabaza antes de cocinarla. Perfore la cáscara con un tenedor, luego hornee a 180 °C durante una hora, o hasta que la pulpa se note tierna. Cuando esté cocida, córtela por la mitad y retire las semillas. Raspe para extraer la pulpa y conserve en la heladera para luego usarla en distintas preparaciones: sopa, rellenos de tartas, souffles, puré, etc.