Aunque parezcan limpias, las sábanas están impregnadas de sudor, saliva, escamas de piel muerta, ácaros y grasa cutánea nociva para los propensos al acné. Para protegerte, mirá qué tratamiento dar a tu ropa de cama.
Frecuencia del lavado
- Una vez a la semana: ideal.
- Cada dos semanas: totalmente aceptable.
- Una vez por mes: satisfactorio, pero no bien.
- Cada seis semanas: arriesgado.
- Más de dos meses: espeluznante.
Para una limpieza a fondo:
- SÁBANAS Y FUNDAS DE ALMOHADAS
En general, podés lavar las sábanas en agua caliente o tibia con el detergente que prefieras. Algunos quitamanchas fuertes sin cloro y el bórax ayudan a aflojar y disolver la grasa y las células de piel que se incrustan en la ropa de cama.
- ALMOHADAS Y EDREDONES
Revisá las etiquetas con indicaciones de lavado, pero casi siempre estos artículos pueden lavarse a máquina, con agua fría, y secarse en el secarropas en un ciclo con poco calor. Si tenés un edredón muy esponjoso, es preferible que lo lleves al lavadero automático.
- MANTAS
Lavalas dos o tres veces por año, según indiquen las etiquetas de lavado. Y no olvides lavar las mantas que hayas usado durante una enfermedad tan pronto como te recuperes.
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gracias por los consejos

Buenos consejos

¡¡GRACIAS POR LOS CONSEJOS!!!

excelente ¡¡¡¡¡¡

bien

Muy importante

Está bueno

se puede usar lavandina para ropa de colores

Muy buena nota para tener en cuenta.

Sabanas= lavado semanal!! Los ácaros no los vemos pero se juntan de a millones!!! Y son los causantes de muchas molestias y enfermedades!!!